Con vistas a acelerar la transición digital y una movilidad más inteligente en la UE, el Consejo ha adoptado un nuevo marco para la implantación de los sistemas de transporte inteligentes y, para ello, ha revisado la Directiva de 2010.
"Gracias a los sistemas de transporte inteligentes podemos ahorrar tiempo, reducir las emisiones y la congestión y simplificar la planificación de los desplazamientos. La nueva Directiva que hoy adoptamos es un hito en nuestra trayectoria hacia una movilidad más inteligente, más segura y más eficiente en toda Europa.", declaró Raquel Sánchez Jiménez, ministra en funciones de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana de España.
Principales objetivos del nuevo acto legislativo
La Directiva revisada se propone tener en cuenta los avances tecnológicos, como la movilidad conectada y automatizada, las aplicaciones de movilidad según demanda y el transporte multimodal.
Asimismo, se propone acelerar la disponibilidad y mejorar la interoperabilidad de los datos digitales que dan información a servicios como los planificadores de viajes multimodales y los servicios de navegación. Esto permitirá a los vehículos y las infraestructuras viarias comunicarse entre sí para, por ejemplo, advertir de acontecimientos imprevistos, como un embotellamiento.
La Directiva revisada constituye, por lo tanto, un paso importante para la creación del espacio común europeo de datos relativos a la movilidad.
Principales disposiciones de la nueva Directiva
La Directiva revisada amplía el ámbito de aplicación de la Directiva anterior para abarcar los servicios emergentes, como los servicios de información, reserva y expedición de billetes multimodales (como aplicaciones para buscar y reservar viajes en los que se combinen el transporte público, vehículos compartidos o servicios de bicicletas), la comunicación entre vehículos e infraestructuras y la movilidad automatizada.
La nueva Directiva también establece objetivos para la digitalización de información crucial, como la relativa a los límites de velocidad, las obras de carreteras y los nodos de acceso multimodal, y la prestación de servicios esenciales, como la información en materia de seguridad vial. Las ventajas para quienes usan el transporte se plasmarán en una cobertura más amplia de información en tiempo real y sistemas de asistentes de velocidad inteligentes más precisos.
La nueva Directiva conserva el carácter marco de la Directiva de Sistemas de Transporte Inteligentes de 2010 y las diversas intervenciones técnicas mediante actos delegados y de ejecución. La Directiva revisada contiene por ello un programa de aplicación que abarca al menos los próximos cinco años y un ámbito geográfico preciso de la red de carreteras cuyo requisito básico consiste en se pueda acceder a los datos y se puedan reutilizar. Mediante actos delegados, la Comisión podrá, además, complementar algunos aspectos de este programa de ejecución.
Los tipos de datos necesarios, que deben estar disponibles en toda la Unión, como las condiciones de acceso a los túneles y puentes, los límites de velocidad, los planes de circulación del tráfico, las restricciones de acceso permanentes, los cierres de carreteras, las obras de carreteras, las medidas temporales de gestión del tráfico, además de los servicios esenciales, como los servicios de información sobre el tráfico en relación con la seguridad vial, figuran en los anexos de la nueva Directiva.
Próximas etapas
Tras ser adoptada formalmente hoy por el Consejo, la nueva Directiva se publicará en el Diario Oficial de la Unión Europea en las próximas semanas y entrará en vigor a los 20 días de su publicación. Los Estados miembros dispondrán de 24 meses a partir de la entrada en vigor de la nueva Directiva para cumplir lo dispuesto en ella.
Contexto
En diciembre de 2020, la Comisión Europea adoptó la Comunicación sobre la Estrategia de Movilidad Sostenible e Inteligente, que propone una transformación fundamental del sistema europeo de transporte hacia la consecución del objetivo de lograr una movilidad sostenible, inteligente y resiliente. La digitalización es un motor indispensable de esta transformación, que hará que todo el sistema de transporte sea ininterrumpido y más eficiente. Asimismo, aumentará los niveles de seguridad, protección, fiabilidad y comodidad. La Estrategia define la implantación de sistemas de transporte inteligentes como una medida fundamental para crear un sistema de movilidad multimodal conectado y automatizado. Los sistemas de transporte inteligentes integran las telecomunicaciones y las tecnologías de la información con la ingeniería de transporte con vistas a planear, diseñar, manejar, mantener y gestionar los sistemas de transporte.
La Directiva 2010/40/UE (Directiva sobre Sistemas de Transporte Inteligentes) se concibió como marco para acelerar y coordinar la implantación y la utilización de los sistemas de transporte inteligentes aplicados al transporte por carretera y sus interfaces con otros modos de transporte. Los importantes avances tecnológicos habidos desde entonces hacen ya necesaria una reforma radical del marco legislativo. Con este fin, el 15 de diciembre de 2021, la Comisión presentó una propuesta de revisión de la Directiva. La propuesta forma parte de un paquete de iniciativas legislativas destinadas a contribuir a los objetivos de descarbonización, digitalización y una mayor resiliencia de la infraestructura de transporte. El Consejo alcanzó una orientación general sobre esta propuesta el 2 de junio de 2022 y, tras las negociaciones interinstitucionales con el Parlamento Europeo («diálogos tripartitos»), el 9 de junio de 2023 se alcanzó un acuerdo provisional sobre el texto de la Directiva revisada.
(Consejo de la UE y del Consejo Europeo)
