En 2018, el fundador y presidente de la Fórmula E, Alejandro Agag, estaba desayunando con su buen amigo y leyenda del automovilismo, Gil De Ferran, cuando ambos soñaron con una nueva serie de automovilismo ecológico y totalmente eléctrico llamada Extreme E.
Esta serie anual de cinco carreras, que tiene lugar en algunos de los lugares más remotos del mundo, pretende contar la historia del cambio climático y mostrar entornos dañados. La pista elegida fue Glenmuckloch, una mina de carbón a cielo abierto en desuso situada en Dumfries y Galloway (Escocia).
Además de ofrecer un telón de fondo espectacular, la zona ilustra el paso de los combustibles fósiles a las energías renovables. En la actualidad se está desarrollando una instalación hidroeléctrica de bombeo, que permite almacenar la energía eólica bombeando agua a un embalse y utilizarla posteriormente para generar energía hidroeléctrica.
Una ola de innovación
Como socio tecnológico oficial de Extreme E, Vodafone Business está trabajando con ellos para integrar capacidades como el 5G, las redes privadas móviles, el Internet de las Cosas (IoT)y la computación de borde multiacceso en sus operaciones globales. Pero el apoyo también se extiende a los Legacy Programmes de la serie. En cada lugar que visita, Extreme E pretende dejar un impacto positivo duradero trabajando con organizaciones locales y con el propio Comité Científico de la serie.
Los proyectos anteriores incluyen una asociación con la Fundación Ba'a en Arabia Saudí en una iniciativa de conservación de tortugas en peligro de extinción y, el año pasado, el equipo trabajó con MEDSEA para lanzar un nuevo sistema de detección temprana de incendios forestales basado en IoT en Cerdeña.
Esta vez, estamos ayudando a poner de relieve los problemas a los que se enfrenta el salmón atlántico como consecuencia del cambio climático.
Pesca de datos
Durante siglos, el río Nith ha sido el hogar del salmón atlántico de Escocia, pero el número de salmones adultos que regresan ha disminuido en las últimas décadas debido al descenso de la calidad del agua, así como al aumento de las temperaturas y la erosión de las riberas.
Las temperaturas del agua superiores a 23 grados pueden causar problemas a la biología del salmón, ya que los huevos son incapaces de sobrevivir al calor. Los niveles variables del agua son igualmente peligrosos para esta especie vulnerable. Cuando el nivel es bajo, les resulta difícil remontar la corriente, mientras que cuando es alto, favorece la erosión de las riberas. El material erosionado fluye río abajo y asfixia los huevos de salmón, aumentando su mortalidad.
Además, en la cuenca del Nith se ha extraído carbón durante décadas y la última mina no se cerró hasta los dos últimos años, lo que ha tenido un claro impacto en la calidad del agua.
En colaboración con la Nith District Salmon Fishery Board, estamos utilizando de nuevo la tecnología IoT para resolver estos problemas. Hemos instalado varios dispositivos "hidrosensibles" alrededor del río, que pueden controlar la temperatura, la acidez y los niveles de contaminación, y transmitir los datos a los investigadores en tiempo real. Así podrán tomar medidas para proteger al salmón y otras especies del río.
El sistema Hydrosense también medirá la eficacia de las medidas de conservación, como la restauración de hábitats y la repoblación piscícola.
Antes, estas evaluaciones se recogían manualmente y se transportaban a un laboratorio para su análisis. Además de llevar mucho tiempo, las muestras sólo se recogían un par de veces al año, lo que significaba que podía ser demasiado tarde para tomar medidas preventivas.
Las raíces del cambio
Además, en el marco del proyecto se plantarán 200 hectáreas de bosques a lo largo de las orillas del río para ayudar a estabilizar el suelo. Como las raíces se aferran al suelo, minimizan la erosión y dan sombra a los ríos refrescando la temperatura del agua. 100 presas agujereadas también ayudarán a ralentizar el caudal del río y a reducir la erosión.
En Vodafone estamos encantados de colaborar en estos esfuerzos de conservación y mostrar cómo la tecnología puede ayudar a hacer frente a la emergencia climática. Nos hemos comprometido a garantizar la ecologización de nuestras propias operaciones y también estamos trabajando con nuestros clientes empresariales para reducir sus emisiones de carbono en un total de 350 millones de toneladas entre 2020 y 2030. Esto se conseguirá en gran medida gracias a nuestras soluciones IoT.
(Vodafone)
Vodafone y Extreme E se unen para proteger el salmón escocés
09/06/23- 1699