En los últimos 10 años, el sector del IoT ha crecido rápidamente y ha alcanzado escala, según IoT Analytics, una empresa de investigación de mercado especializada en el internet de las cosas. En 2020, habrá 11.700 millones de conexiones de IoT, superando por primera vez los 10.000 millones de conexiones que no son de IoT, lo que señala una nueva era en el desarrollo de IoT.
Market Insight Reports informa de que el IoT con geolocalización crecerá de los 40.000 millones de dólares actuales a los 74.000 millones en 2025, lo que lo convierte en uno de los segmentos más potentes y de más rápido crecimiento del IoT.
Para realizar muchas aplicaciones típicas del IoT, es necesaria una localización precisa. El transporte y la logística, por ejemplo, necesitan conocer la ubicación de su flota para evitar la pérdida de mercancías; el aparcamiento inteligente, por su parte, requiere determinar la ubicación de los vehículos para despachar las plazas de aparcamiento de modo que los recursos se asignen de forma racional y completa. Todos ellos no requieren un posicionamiento geográfico preciso para ofrecer servicios de alquiler de bicicletas basados en la ubicación, el estado y el uso del vehículo.
Por ello, los rastreadores GPS tradicionales también tienen la desventaja de requerir que el usuario los lleve consigo para mantener datos de posición precisos. La duración de la batería es el primer factor a tener en cuenta. En los rastreadores GPS tradicionales es necesario sustituir la batería varias veces al año debido a su gran consumo de energía. El coste es la segunda preocupación. ¿Cuál es la frecuencia óptima con la que una solución debe recoger la información de localización de un dispositivo? ¿Es una vez por minuto o una vez al día? El coste y la duración de la batería de un dispositivo están directamente relacionados con la frecuencia con la que adquiere la información de localización.
Con los rastreadores GPS Jimi, podemos satisfacer fácilmente las necesidades de nuestros clientes. En cuanto a la duración de la batería, utilizamos baterías de alta capacidad de 10.000mAh en la mayoría de nuestros rastreadores GPS que no son recargables. También se pueden encontrar baterías de polímero de litio recargables y alimentadas por energía solar en los rastreadores GPS. Además, nuestros rastreadores GPS son flexibles en cuanto a la duración y el coste de la batería. Con el modo de trabajo inteligente, el dispositivo carga puntos de localización diaria o semanalmente; con el modo de reposo, el dispositivo puede ponerse en un modo de espera prolongado, cargando un punto de localización cada diez días o meses; también puede seleccionar el posicionamiento en tiempo real y seguir cargando puntos de localización indefinidamente. El funcionamiento en varios modos le permite ahorrar dinero de forma eficaz.
(Jimilab)
¿Por qué es problemática la orientación precisa en el transporte y la logística?
21/09/22- 2439