Las expectativas de los consumidores reconfigurarán las necesidades y la economía de Internet. En la actualidad, más del 60 % de los consumidores de la región EMEA espera conectar a Internet coches, electrodomésticos, energía y agua, y las redes de banda ancha deben ampliarse para poder hacerlo. Sin embargo, la mayor dependencia de la banda ancha para las tareas cotidianas significa que, si bien la velocidad sigue siendo la principal prioridad para las actualizaciones (40% de los encuestados), la seguridad ocupa ahora un cercano segundo lugar (38% de los encuestados).
La encuesta sobre banda ancha de Cisco, publicada hoy, revela que la evolución de las expectativas de los consumidores modificará las necesidades y la economía de Internet. Los habitantes de EMEA (Europa, Oriente Medio y Sudáfrica) se están replanteando para qué confían en Internet, equilibrando las demandas clásicas de velocidad y fiabilidad con las necesidades cada vez mayores de una mayor conciencia ecológica, una infraestructura en la nube segura y la consumerización de tecnologías como la Internet de las cosas (IoT), que conecta nuestros dispositivos, desde coches inteligentes a electrodomésticos. Esto ha llevado al 79% de los participantes en la encuesta a calificar la banda ancha de infraestructura nacional crítica, lo que aumenta la necesidad de que la industria tecnológica responda a estas demandas y acelere el camino hacia una Internet más sostenible y segura para el futuro.
Los consumidores quieren invertir en una banda ancha sostenible
El coste en carbono de la conectividad de banda ancha es una prioridad absoluta para los consumidores. La encuesta sobre banda ancha de Cisco reveló que el 65% de los consumidores de EMEA están preocupados por la huella de carbono de su banda ancha, siendo los jóvenes de entre 18 y 24 años los más preocupados (73%). Además, el 77% afirma que estaría dispuesto a pagar más por una banda ancha sostenible, y alrededor de una cuarta parte está dispuesta a pagar un precio superior al 20%. Esto respalda una tendencia más amplia del mercado, mostrada en una encuesta de 2019 de Nielsen y otra de 2022 de Globescan, que revelan una concienciación generalizada de los consumidores en torno al impacto medioambiental de los productos que utilizan y una demanda de que las empresas den un paso al frente y mitiguen los impactos negativos sobre el planeta. compartir y una toma de decisiones más rápida.
La seguridad es una prioridad a medida que aumenta el número de usuarios en línea
Paralelamente a la creciente preocupación por el medio ambiente, la aparición del trabajo híbrido y la cada vez mayor difuminación entre la vida profesional y personal de los empleados trae nuevos riesgos al hogar. A pesar de que la mayoría de los consumidores utilizan su banda ancha para tareas como las bancarias y el trabajo, las contraseñas siguen siendo la forma más popular (53%) en que los encuestados protegen las redes y dispositivos domésticos; sólo una cuarta parte ha activado el cortafuegos de su router. Y ello a pesar de que estudios anteriores de Cisco revelaron que el 57% de los consumidores temen que los ciberdelincuentes pirateen sus dispositivos. Aunque la velocidad sigue siendo la principal prioridad entre quienes planean actualizar su banda ancha en el próximo año (seleccionada por el 40%), la seguridad ocupa ahora un cercano segundo lugar, clasificada por el 38% de los consumidores como prioridad máxima a la hora de elegir su paquete de banda ancha.
La conexión aumentará a medida que los consumidores amplíen su vida digital
A medida que el número de dispositivos IoT en línea crece de miles de millones a billones, también lo hace la demanda de ancho de banda y capacidad de procesamiento para analizar todos los datos producidos. Según la encuesta Cisco Broadband Survey, no hay signos de que esto vaya a ralentizarse. Los consumidores están adoptando el cambio hacia una vida digital "más inteligente". La mayoría ya tiene, o espera tener, conectados sus coches (67%), luces (74%), electrodomésticos (71%), energía (76%) y agua (64%). De hecho, más de la mitad de los consumidores encuestados (54%) manifestaron sentirse satisfechos con las nuevas formas de conectar sus hogares y sus vidas a Internet. Y ello a pesar de que la mayoría (63%) afirma que la crisis del coste de la vida ha cambiado su forma de gastar dinero en servicios digitales: El 21% se ha pasado a un paquete de banda ancha más barato y el 16% ha cancelado servicios de streaming.
"Se calcula que la huella de carbono del sector de las tecnologías de la información y la comunicación representa en torno al 2,1 - 3,9% de las emisiones mundiales de gases de efecto invernadero, y más de la mitad procede de las redes y los centros de datos. Cisco tiene la misión de transformar la economía y la sostenibilidad de Internet del Futuro. Eso significa diseñar productos teniendo en cuenta la eficiencia energética y la seguridad, adoptar principios de economía circular en el desarrollo de productos y las operaciones empresariales, y adoptar un enfoque inteligente y sostenible de la gestión del ciclo de vida. Además del panorama de amenazas a la ciberseguridad en constante evolución y expansión, tenemos que hacer frente a la creciente amenaza del cambio climático. Dar prioridad a la sostenibilidad y la seguridad en la infraestructura de banda ancha es, por tanto, crucial para permitir una transformación digital duradera y resistente", afirma Gordon Thomson, Vicepresidente de Proveedores de Servicios - EMEA, Cisco.
"El viejo adagio tecnológico de 'más rápido, más barato, mejor' hace tiempo que dejó de ser relevante. Ahora se trata de simplificar las soluciones y construir redes que puedan impulsar la conectividad global y el crecimiento económico, facilitando y protegiendo la digitalización y la automatización de las actividades cotidianas, todo ello sin perder de vista nuestro impacto en el futuro", continuó.
(Cisco)
