La conservación del agua y la reducción de residuos tendrán prioridad sobre alcanzar el Net Zero en los próximos 1-3 años, ya que las empresas agrícolas mundiales buscan soluciones de Internet de las Cosas para apoyar sus ambiciones.
Las empresas agrícolas dan prioridad a la conservación del agua y la reducción de residuos frente a otras ambiciones de sostenibilidad, ya que se prevé que los niveles de sequía sigan amenazando los medios de subsistencia en todo el mundo.
Los líderes del sector agrario sitúan la conservación del agua y la reducción de residuos a la cabeza de su lista de prioridades (33 %), seguidos de alcanzar el objetivo de "Red Cero" en 2050 (29 %), ya que el sector se enfrenta a una escasez inmediata al tiempo que pretende alcanzar objetivos medioambientales, sociales y de gobernanza (ESG). Otra de las prioridades principales son los objetivos de bienestar y seguridad del personal (22%). Los resultados proceden de un nuevo informe de investigación global independiente encargado por Inmarsat, líder mundial en comunicaciones móviles por satélite.
El informe de Inmarsat "Accelerating sustainable action through IoT" (Acelerar la acción sostenible a través de la IO) explora las opiniones de más de 200 altos responsables de tecnología y ESG en empresas agrícolas de Europa, América del Norte y del Sur, África y Asia. En la encuesta se preguntaba a los profesionales sobre sus prioridades en materia de ESG y si creían que los datos proporcionados por las soluciones del "Internet de las cosas" podrían ayudar a mejorar la transparencia de los informes y los resultados sostenibles en general.
Alcanzar los objetivos ASG del sector a través de la IoT
Los resultados sugieren que el sector está abordando prioridades de sostenibilidad que compiten entre sí, lo que pone de relieve la necesidad de soluciones conectadas inteligentes para ayudar a las empresas a alcanzar objetivos comunes. El ESG es una preocupación para casi todas las empresas agrícolas, y 9 de cada 10 afirman que es una prioridad máxima para la dirección. Mientras tanto, el 76% afirma tener objetivos ESG claros en los que su empresa está trabajando.
A pesar de este enfoque, los directivos de las empresas siguen teniendo dificultades para realizar un seguimiento de las métricas ASG, y el 51 % de los encuestados afirma tener dificultades para medir los progresos tangibles en relación con la gobernanza medioambiental en particular.
Muchos también creen que carecen de los datos concretos necesarios para alcanzar los objetivos ASG. Casi la mitad cree (45%) que una mejor automatización y digitalización de la captura de datos les ayudaría a comprender mejor sus éxitos y fracasos en materia de ASG. Afirman que, en última instancia, esto les ayudará a alcanzar sus objetivos generales de sostenibilidad.
Por otra parte, el 74 % de los responsables de la toma de decisiones en el sector agrícola tiene previsto aprovechar las soluciones IoT conectadas para medir y comprender con mayor precisión el impacto de sus soluciones de sostenibilidad en el próximo año.
El mismo número ya ha visto el retorno de la inversión de las soluciones IoT cuando se trata de mejorar la sostenibilidad, incluyendo un 20% que ha visto específicamente una reducción en su uso del agua como resultado.
El satélite como solución
El 86% de los encuestados coinciden en que las comunicaciones por satélite son la clave para aprovechar todo el potencial de las soluciones IoT conectadas.
Las redes como Inmarsat ELERA son fundamentales para este proceso, ya que proporcionan una conectividad global ultrafiable para respaldar la recopilación de datos, el análisis y la generación de informes basados en IoT, lo que ayuda a las empresas a alcanzar sus objetivos de consumo de agua y proporcionar pruebas de progreso.
De cara al futuro, parece que los satélites se convertirán en el método de conectividad más popular para las empresas agrícolas a largo plazo, ya que un tercio de las empresas agrícolas espera depender de la red de conectividad por satélite en los próximos 10 años o más. Frente al 22% que prevé depender del WiFi y el 20% que prevé utilizar la telefonía móvil.
Steven Tompkins, Director de Desarrollo de Mercados de Inmarsat, ha declarado: "La agricultura representa una media del 70% de todas las extracciones de agua dulce del mundo. Esto significa que los agricultores están sometidos a una presión constante para reducir su consumo. Esta presión no hace sino aumentar a medida que se suceden los fenómenos meteorológicos extremos y las sequías.
"Sin embargo, si no se puede medir el consumo de agua, no se puede gestionar. Las soluciones basadas en IoT, como el control remoto del riego y la supervisión de tanques y abrevaderos, pueden ayudar a los agricultores a utilizar la cantidad adecuada de agua en el momento oportuno. Las soluciones conectadas también pueden permitir la elaboración de informes ESG más sólidos que conduzcan a una mayor transparencia en todas las operaciones comerciales, permitiendo a los operadores de las explotaciones ahorrar agua, aumentar la eficiencia energética y reducir el uso de combustible, al tiempo que demuestran un progreso tangible en los resultados sostenibles.
"Muchos de los lugares donde se utilizan estas tecnologías están muy alejados de los núcleos urbanos y, por tanto, no están cubiertos por los servicios públicos de Internet celular. La instalación de redes terrestres privadas en estos lugares suele tener un coste prohibitivo, por lo que el satélite es la única solución de conectividad práctica y fiable. La solución satelital adecuada puede tener un formato pequeño, un bajo consumo de energía y un historial de funcionamiento de más de 10 años. Esto reduce al mínimo los costes de conectividad a largo plazo y permite a los agricultores utilizar tecnologías de control y gestión del agua en lugares remotos, mejorando la eficiencia y la sostenibilidad general.
(Inmarsat)
