Los dispositivos inteligentes no solo nos hacen la vida más fácil y cómoda, sino que también nos ayudan a llevar un estilo de vida orientado a la salud. Las soluciones de semiconductores de Infineon Technologies AG están haciendo del Internet de las Cosas (IoT) un componente cada vez más clave de los estilos de vida saludables de diversas maneras.
En 2050, habrá en el mundo más de dos mil millones de personas mayores de 60 años. Al mismo tiempo, según la Organización Mundial de la Salud, el número de personas mayores de 80 años se habrá triplicado. El cuidado de la salud está creciendo en importancia personal y social. Por lo tanto, un estilo de vida sano y activo será crucial para ayudar a las personas a llevar una vida autodeterminada el mayor tiempo posible.
En este contexto, la Internet de los objetos tiene el potencial de apoyar al sector sanitario en todos los niveles, por ejemplo con la prevención predictiva y la monitorización, en el diagnóstico y el tratamiento, así como en la atención de seguimiento y el apoyo en la vida cotidiana.
"La tecnología, y con ella el Internet de las Cosas, puede tener un impacto significativo en el sector sanitario", afirma Thomas Rosteck, Presidente de la División Connected Secure Systems de Infineon. "La atención sanitaria preventiva es especialmente esencial. Hoy en día, ya existen muchos dispositivos, como los rastreadores de fitness, que nos motivan a vivir de forma más saludable y a cuidar mejor de nuestro cuerpo. Hasta ahora, los dispositivos IoT se utilizaban principalmente para conectarse a la nube o dar órdenes a un dispositivo. Pero ahora vemos que los dispositivos interactúan cada vez más entre sí. Esto abre todo un nuevo abanico de posibilidades para llevar una vida más sana, larga e independiente."
"Nunca es demasiado pronto para centrarse en la salud y la forma física", añade Adam White, Presidente de la División Power & Sensor System de Infineon. "Los semiconductores de empresas como Infineon desempeñan un papel fundamental para hacer realidad muchas aplicaciones inteligentes para la salud. Desde la recepción de información a través de sensores, pasando por la conexión y el procesamiento, hasta el almacenamiento seguro de los datos en el dispositivo, todo esto sólo es posible gracias a los semiconductores. Esperamos un gran crecimiento de más sistemas y aplicaciones que puedan cubrir el sector de la salud inteligente y proporcionar a los consumidores información relevante y detallada para mejorar su forma física."
Los semiconductores son componentes elementales en todas las soluciones. Los sensores registran datos vitales, los microcontroladores los procesan y transmiten, los actuadores desencadenan acciones, las tecnologías de red integran servicios en la nube con conocimientos médicos y las soluciones de seguridad garantizan la protección de datos personales extremadamente sensibles.
Control de la salud fácil e intuitivo en todas partes
Los teléfonos inteligentes y los wearables ya pueden medir biofunciones como el ritmo cardíaco y la presión arterial, registrar y evaluar ECG y compartir esta información. Sin embargo, ya existen otros dispositivos inteligentes para la salud que controlan las actividades físicas y contribuyen así a un estilo de vida activo:
- Por ejemplo, un anillo inteligente discreto que controla el sueño, la actividad, la recuperación, la temperatura corporal, la frecuencia cardíaca y los niveles de estrés puede medir de forma fiable las funciones vitales durante hasta siete días con una sola carga de batería y puede identificar tendencias en una fase temprana. Esto facilita aún más el registro y la evaluación de las actividades físicas de una forma coherente y sin fisuras, algo que ya es posible con los smartwatches.
- Los sensores del sueño basados en tecnología de radar son ahora tan pequeños y fáciles de usar que pueden sustituir a los exámenes en el entorno artificial de un laboratorio del sueño: Los pacientes pueden registrar su comportamiento durante el sueño con gran precisión en casa, sin factores de estrés externos, en un entorno familiar, incluso cuando están cubiertos por la ropa de cama.
- Los sensores de CO 2 pueden medir continuamente la calidad del aire para proporcionar información que permita encender o apagar automáticamente la ventilación o el aire acondicionado inteligente en el momento justo. Esto puede ayudar a proteger contra la transmisión de bacterias y virus y también puede aumentar la capacidad de concentración y trabajo en un aire ambiente más saludable.
- Las casas y los edificios inteligentes ya están contribuyendo a proporcionar unas condiciones de vida y de salud óptimas y están ayudando tanto a los residentes como a los cuidadores al hacerse cargo de numerosas aplicaciones de forma autónoma e inteligente (como la ventilación autónoma, la alerta a los servicios médicos de urgencia y la facilitación del trabajo con tecnologías como los robots).
(Infineon Technologies)
