Un nuevo informe de investigación de la firma analista de IoT Berg Insight revela que la penetración de los contadores eléctricos inteligentes en Norteamérica alcanzó el 74% en 2021. En general, la base instalada de contadores de electricidad inteligentes crecerá a una tasa de crecimiento anual compuesta del 4,8 por ciento durante 2021-2027 para alcanzar un total de 173,4 millones de unidades al final del período de previsión. En los próximos seis años, la penetración de los contadores inteligentes en EE.UU. aumentará hasta alcanzar un nivel del 93 por ciento, mientras que la cifra respectiva para el mercado canadiense, más avanzado, será ligeramente superior, del 94 por ciento.
"Los despliegues de la primera ola seguirán creciendo en los próximos años y estarán impulsados por el lanzamiento de nuevos proyectos importantes por parte de los adoptantes tardíos en el noreste de EE.UU. y el este de Canadá. Mientras tanto, los despliegues de la segunda ola para los primeros adoptantes también se están acelerando y aumentarán su participación en los volúmenes de envíos anuales de alrededor del 12% en 2021 a alrededor del 75% en 2027", dijo Mattias Carlsson, analista de IoT en Berg Insight. Según el estudio, los envíos anuales de contadores eléctricos inteligentes en Norteamérica pasarán de 10,7 millones de unidades en 2021 a 17,3 millones en 2027. La pandemia de Covid-19 tuvo un impacto notable en los despliegues durante 2020, con un descenso interanual de alrededor del 13% en los volúmenes de envíos anuales. Desde entonces, el mercado ha experimentado un aumento de los envíos y se espera que el número de envíos anuales alcance su máximo en 2024 con 18,4 millones de unidades y, a partir de entonces, disminuya ligeramente hasta un nivel de 17 millones de unidades hasta el final del periodo de previsión.
Junto con el aumento de los proyectos de sustitución de contadores inteligentes, el desarrollo de la tecnología de medición inteligente en el mercado norteamericano ha cambiado de orientación en los dos últimos años para atender nuevas demandas más allá de la medición inteligente. Las empresas de servicios públicos intentan ahora aprovechar sus redes existentes para una gama más amplia de aplicaciones de ciudad inteligente, al tiempo que tratan de encontrar la manera de hacer frente a la integración en la infraestructura de la red de un número cada vez mayor de vehículos eléctricos y recursos energéticos distribuidos. "Ha empezado la carrera entre los principales proveedores para desarrollar y comercializar con éxito los casos de uso más atractivos de la tecnología de medición inteligente de segunda generación. Además de una mayor potencia de cálculo y capacidades analíticas de borde que permiten un nuevo conjunto de beneficios, las empresas de servicios públicos buscan cada vez más integrar múltiples aplicaciones de ciudad inteligente en una única solución", concluyó el Sr. Carlsson.
(Berg Insight)
