Durante años, las cámaras se usaron principalmente para vigilancia, pero la digitalización y la IA han ampliado su papel, convirtiéndolas en plataformas sensoriales clave en edificios inteligentes.
Las cámaras de videovigilancia han evolucionado más allá de su papel tradicional en la seguridad, convirtiéndose en elementos clave dentro de los entornos de edificios inteligentes. Gracias a los avances en análisis de vídeo, integración con inteligencia artificial y conectividad IoT, estos dispositivos permiten no solo prevenir incidentes, sino también optimizar la gestión operativa y energética de instalaciones comerciales, industriales y residenciales.
En la actualidad, las cámaras se utilizan en aplicaciones tan diversas como marketing, gestión de estacionamientos, planificación de personal o control de sistemas de climatización e iluminación. Su papel como sensores visuales dentro de entornos conectados es cada vez más relevante, contribuyendo a la automatización, eficiencia energética y sostenibilidad de los edificios.
IA, edge computing y cloud: el nuevo estándar
Uno de los principales avances tecnológicos que ha propiciado esta transformación es el uso de análisis de vídeo en tiempo real mediante algoritmos de IA. Estas capacidades permiten que las cámaras no solo graben, sino que también detecten patrones, reconozcan matrículas, identifiquen rostros o comportamientos sospechosos y emitan alertas automáticas. La posibilidad de realizar este procesamiento en el borde (edge computing), directamente en el dispositivo, o en servidores centrales en la nube, brinda flexibilidad y velocidad en la respuesta.
La adopción de resoluciones 4K y 8K también ha mejorado significativamente la precisión de las capturas, facilitando aplicaciones que requieren gran detalle, tanto en seguridad como en sectores como el retail o la gestión del tráfico.
Más allá de la videovigilancia: sensores visuales multifuncionales
Hoy en día, muchas cámaras actúan como sistemas multiesensoriales capaces de captar además de imágenes, audio, temperatura o señales químicas. Esto ha dado lugar al concepto de "inteligencia visual", que amplía el uso de la videovigilancia hacia áreas como la planificación de aforos, la detección temprana de incendios o la gestión ambiental.
En este sentido, soluciones como Aviotec 8000i IR de Bosch utilizan algoritmos de aprendizaje profundo para detectar humo y llamas en tiempo real, incluso en condiciones adversas como oscuridad, humedad o fuerte circulación de aire, adelantándose a los sistemas tradicionales de detección.
La cámara como herramienta de análisis operativo
Además de aumentar la seguridad, las cámaras inteligentes están aportando valor añadido en sectores como el comercio y la hostelería. Permiten analizar el comportamiento de los clientes, identificar los momentos de mayor afluencia y ajustar la dotación de personal o las campañas de marketing. También facilitan el control automatizado de sistemas HVAC y de iluminación según la ocupación de los espacios, contribuyendo así a la eficiencia energética y sostenibilidad de los edificios.
Protección de datos y regulación en el centro del debate
El aumento en el uso de tecnologías basadas en vídeo ha traído consigo preocupaciones éticas y legales. En Europa, el cumplimiento del Reglamento General de Protección de Datos (GDPR), las normativas sobre reconocimiento facial y la necesidad de señalizar las áreas monitoreadas están contribuyendo a una mayor transparencia y aceptación pública de estas soluciones. No obstante, el establecimiento de marcos legales claros continúa siendo esencial para garantizar un uso responsable.
Light + Building 2026 destacará el potencial del vídeo inteligente
Todas estas innovaciones estarán en el centro de la atención durante la próxima edición de Light + Building, que se celebrará del 8 al 13 de marzo de 2026 en Frankfurt. El área temática Intersec Building reunirá a empresas líderes de los sectores de seguridad y tecnología para edificios, presentando soluciones que combinan protección, eficiencia operativa y conectividad.
Además de las aplicaciones tradicionales como la protección contra incendios, el control de accesos y la videovigilancia, el enfoque se centrará en sistemas integrados para edificios conectados, con especial atención a la protección de infraestructuras digitales y datos sensibles. En hogares y edificios inteligentes, la integración de sistemas de distintos fabricantes permite incorporar todos los componentes relevantes para la seguridad en una plataforma común.
Light + Building 2026 se perfila como una cita clave para descubrir cómo la tecnología de vídeo conectada está redefiniendo los estándares de seguridad, automatización y sostenibilidad en la edificación moderna.
(Messe Frankfurt)